Del turismo: al mal tiempo, buena cara… y muchas ganas

Puebla, Pue.- Durante el mes de julio se celebró que el turismo de la ciudad había tenido un incremento de más de un 60% en comparación con la anterior administración, dando como resultado un aumento en el porcentaje de ocupación y por tanto en el crecimiento de la infraestructura hotelera. Asimismo, se dio un incremento en la permanencia de los turistas, pasando de un promedio de 1.4 noches a 2 noches, lo cual es un logro considerable.

Ante dicho tema Ana Lissette Segovia Philip, catedrática del Departamento Académico de Administración, Economía y Finanzas del Tecnológico de Monterrey en Puebla, detalló que el incremento del dólar nos da la ventaja de competir por precio por un tiempo. “En una pequeña ventana de oportunidad, también tenemos el que en otras entidades se esté sufriendo de  más inseguridad y violencia (cuestionable y penoso, por supuesto) y por esta razón, las personas prefieran viajar a la ciudad (o entidad) de Puebla”, dijo.

Además, comentó que hoy en día, se tiene, de los turistas que llegan a Puebla, 81 son nacionales y 19 son extranjeros. Éstos tienen un gasto promedio de $800 por día y permanecen en promedio dos noches. Y  algunas otras cifras como a qué destinos del interior del Estado viajan, la oferta hotelera (registrada/formal) y su nivel, las atracciones que visitaron, las razones por las que nos visitó, lo que más les gustó, entre otros.

La especialista aseguró que se debe seguir evaluando, midiendo y estudiando este mercado para aprovechar dicha información con el fin de generar estrategias que impulsen aún más el turismo en nuestra entidad entre ellas.

·         Incrementar la seguridad. No hay un factor que ahuyente más a un turista que el sentirse vulnerable. Pese a que la percepción de la seguridad es buena, según las estadísticas que se pueden encontrar en el portal de la Secretaría, hay que recordar que la publicidad más importante se genera de boca en boca y por un incidente, se pueden desalentar a diez o más turistas potenciales. De hecho las estadísticas del año pasado así lo muestran, al indicar que el conocimiento del destino “Puebla” se dio principalmente a través de recomendaciones de familiares y amigos.

·         Aprovechar el programa de Pueblos Mágicos, el cual ha tenido una buena difusión. En nuestra entidad contamos con nueve propuestas por lo cual debemos aprovechar estos atractivos y diversidad y darlos a conocer. Evidentemente, si el turismo en estos sitios se incrementa, es probable, que el de la capital también lo haga pues los mismos recorridos o rutas pueden iniciar desde la Angelópolis.

      Lo anterior va ligado de manera directa al tema de la infraestructura y capacidad de respuesta. Sobre todo en algunas de las comunidades mencionadas en el anterior apartado, aún existe poca planeación e infraestructura para recibir a números grandes de turistas. Esto implica hospedaje, estacionamiento y vialidad, conectividad y servicios, entre otros.

Entre los motivos por los que vinieron los turistas a nuestra entidad, se encuentra el 55% por placer, un 17% por visita a familiares o amigos y de ahí tenemos que entre los motivos académicos, congresos y convenciones y negocios se podría sumar casi un 21%. Por lo anterior, si bien no podemos descuidar la principal razón por la que nos llegan (placer) y sobre la segunda no tenemos mucha influencia, es cierto que la tercera es susceptible de potencializar. Adicional a que se ha incrementado considerablemente la infraestructura destinada a ese tipo de actividades, hay que considerar que las mismas pueden incrementar el turismo “entre semana” y no el tradicional de “fin de semana o vacaciones”. Éste es un nicho que nos falta explorar y explotar mucho más.

      Las estadísticas del 2015 nos muestran que, si bien, el conocimiento del destino “Puebla” se dio en un mayor porcentaje por recomendación, en segundo lugar, éste se dio a través de páginas web y medios digitales. Asimismo, la organización de dicho viaje, se da principalmente a través de estas herramientas. De esta forma, lo conveniente es dar un mayor aprovechamiento a las mismas y utilizarlas de manera estratégica para llegar a los distintos mercados (eco-turismo, turismo gastronómico, turismo cultural, etc.).

Segovia Phillis concluyó que es indiscutible que se necesitará invertir en esta industria a largo plazo y esto conlleva la idea de un turismo más sustentable y responsable en todos los sentidos (económico, ambiental y social).

“Habrá que tomar en cuenta los retos y oportunidades que ya están aquí y las que se vendrán como nuevas generaciones, nuevos modelos de hacer negocios, macro-tendencias, entre otros. No podemos dormirnos en nuestros laureles, habrá que trabajar en la mejora continua, fijarse metas a largo plazo y adelantarnos a las expectativas de nuestros visitantes. En definitiva, habrá que ofrecer al turista mucho más, un valor agregado constante y generarle una experiencia positiva lo suficientemente duradera para que quiera regresar y aliente a que los demás vengan a maravillarse con lo que tenemos para ofrecerles”, dijo Segovia.